No es tan difícil sustituir el huevo en tus recetas y es mucho más fácil de lo que piensas, solo debes saber identificar la función del huevo en la receta que vayas a realizar. Muchos quieren evitar los huevos para miles de razones, la salud, la cultura, religión, gustos, etc. Aunque la adición de huevos hace que el producto final sea mucho mejor, esto no significa que no podemos prescindir de él.
Se pueden preparar muchos platos que requieran huevos sin sacrificar demasiado el sabor o la textura. El primer paso es identificar qué propósito tiene el huevo en su receta y para luego dar con el sustituto más idóneo. Continua leyendo y empieza a experimentar con diferentes sustitutos de huevo para encontrar cual es el reemplazo perfecto.
4 formas de sustituir el huevo
Dependiendo de su función, puedes utilizar sustitutos apropiados a los huevos sin poner en peligro el sabor. Las distintas funciones de un huevo y las sustituciones apropiadas, son:
1- Como un aglutinante (Coagulante):
Las proteínas del huevo actúan como aglutinante mediante la integración de los ingredientes durante la cocción u horneado, cuando se les climatizada a que cambien la mezcla de líquido a un estado sólido. Ellos ayudan en la prevención de desmoronamiento y proporcionan la estructura de los alimentos.
Ejemplos: Guisos, hamburguesas, panes rápidos, pan de maíz, etc. En este caso, sustituye los huevos que se necesitan por un ingrediente que desempeña el mismo papel. Al igual que el puré de patatas, arroz cocido, las migas de pan, pasta cocida, harina de avena, queso rallado, semillas de lino, etc.
En caso de golosinas dulces como las galletas, se pueden utilizar frutas como plátano, puré de manzana, el polvo de las natillas, el almidón de maíz para llevar a cabo la función de unión. Debes tener en cuenta que el uso de frutas pueden alterar tanto la densidad como el sabor del producto final.
2- Como un agente de fermentación:
Los huevos batidos son un agente de fermentación, ya que incorporan aire a la preparación, que se ampliará en el horno y hará que la torta se eleve. Algunos pasteles utilizan huevos batidos como su única fuente de levadura.
Ejemplos: Galletas, pasteles, magdalenas, merengues, suflés, etc. Para sustituir el huevo en estas recetas puedes utilizar polvo de hornear, vinagre, bicarbonato de sodio (más el jugo de limón o jugo de naranja), suero de mantequilla (con bicarbonato de sodio), todos estos productos juegan un rol equivalente como leudante en la preparación.
3- Para proporcionar la humedad y textura (Emulsionar):
Los huevos tienen propiedades de emulsión. Las yemas de huevo permiten que las grasas permanezcan dispersa en el agua, lo que promueve el espesamiento y la estabilidad del producto. Así que esta propiedad, da a los productos horneados una suavidad y textura cremosa que además proporciona la humedad.
Ejemplos: Mayonesa (emulsionante) y, galletas, bollos, panes rápidos. Para reemplazar los huevos en estas recetas puedes utilizar como sustituto el tofu, el cual actúa como un emulsionante de aceite cuando el aceite se añade poco a poco, y quizá por ello se ve que el queso de soja se utiliza para hacer mayonesa vegetariana. Para la humedad adicional, utiliza puré de frutas o frutas como el plátano, puré de manzana, mantequilla de manzana, etc.
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4- Para dar color:
Los carotenoides presentes en los huevos son responsables del color que proporcionan a los alimentos. Esto se encuentra en la yema de huevo, que le dan a las cortezas ese hermoso color marrón dorado.
Ejemplos: Los huevos revueltos, fritos, chuletas, etc. En cuanto al caso de los huevos revueltos, puedes reemplazarlo con el queso de soja con una pizca de cúrcuma. La suavidad de tofu imita la textura cremosa de los huevos y la cúrcuma le da ese hermoso color oro para imitar el color amarillo de los huevos. El tofu también es una fuente inagotable de proteínas.
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Intenta sustituir el huevo de tus recetas con alguno de estos productos, y veras como los huevos no son indispensables en tus platos, y lo mejor de todo es que tus recetas seguirán siendo deliciosas.
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