La impotencia sexual es un problema que afecta a muchos hombres en todo el planeta y para el cual y como no podía ser de otra manera, Hay una gran variedad de remedios caseros para  la impotencia masculina, disfunción eréctil o impotencia eréctil

En este artículo vamos a dar unos remedios caseros para la impotencia que cualquiera va a poder poner en práctica para poder beneficiarse de ellos y en algunos casos hay que decir que los resultados son realmente sorprendentes.

Puede aparecer en jóvenes o adultos y con los remedios de la abuela y remedios herbolarios efectivos se consigue combatir eficazmente como podrás comprobar si es tu caso.

Estos remedios caseros para la impotencia sexual en los hombres pueden sustituir perfertamente a la famosa viagra, todo es probar porque sus efectos están más que demostrado.

 

 7 Remedios caseros para la impotencia

Ginkgo biloba

Incluir en la dieta el ginkgo biloba es algo muy recomendable cuando se tienen problemas de impotencia sexual ya que se asocia al bajo nivel de Zinc en sangre con este problema.

ginseng

Está comprobado como  una de los más eficaces remedios caseros para la impotencia masculina y se la puede considerar como la viagra natural por excelencia ya que en los casos de disfunción eréctil consumirlo diariamente hace que se revierta la situación como con pocos alimentos se consigue.

Yohimbina

Se trata de una hierba muy efectiva para corregir los trastornos sexuales y se obtiene al extraer su corteza. Con esta hierba se consigue que no pase la adrenalina a los receptores celulares que tenemos en la zona de la pelvis y la abdominal. Además sobre esta planta hay muchos estudios que indican que la yohimbina reduce los efectos depresivos que produce la impotencia sexual y ayuda mucho con el cansancio sexual, además de que ayuda a tener buenas erecciones.

Ajo

Y una vez más tenemos en el ajo a uno de los mejores remedios caseros para la impotencia sexual. Si comemos ajo, especialmente en crudo y habitualmente, conseguimos una gran estimulación de la circulación de la sangre. También el ajo es conocido por ser un gran afrodisiaco, como son otros vegetales de la misma familia tales como la cebolla.

Jengibre

Otro alimento que sirve como medicina natural para curar y tratar la impotencia eréctil y además un sin fin de problemas de salud. Estimula el apetito sexual pero también actúa como tónico y ayuda mucho a tratar con éxito la impotencia.

Combinación especial

Nos preparamos un rico chocolate de  taza y le añadimos un poco de nuez moscada, sin pasarse y canela. Los resultados mejor que los descubra cada uno por sí solo…

Es otro de los remedios caseros para la impotencia masculina que funciona mejor, pero todo depende de cada hombre, cada uno es un mundo diferente.

Acupuntura

Con un tratamiento natural a base de acupuntura se consigue mejorar mucho la salud sexual de las personas y en este caso pueden mejorar mucho las erecciones y el apetito sexual. Así lo afirman los hombres que han utilizado la acupuntura para tratar los problemas de impotencia.

Causas de la disfunción eréctil

Cirugía prostática

La probabilidad de disfunción eréctil aumenta después de una prostatectomía radical. Se calcula que entre un 24% y un 68% de los varones sometidos a este tipo de procedimiento quirúrgico desarrolla disfunción eréctil. Este porcentaje varía en función del tipo de técnica quirúrgica utilizada. Por ello, si ha observado algún cambio significativo en su capacidad para alcanzar o mantener una erección después de someterse a una prostatectomía radical o a una resección transuretral de próstata.

Su situación es bastante habitual. Por fortuna, la mayoría de los casos de impotencia sexual tiene tratamiento, independientemente de que estén o no relacionados con una intervención quirúrgica, o la medicación prescrita, existen diversos remedios caseros para la impotencia.

Depresión

La depresión puede anular la capacidad de la persona para disfrutar de los placeres de la vida. No sólo afecta a su mente, también a su cuerpo, en ocasiones de forma inesperada. Como consecuencia, muchos hombres a los que se les ha diagnosticado depresión, sufren además otro problema: disfunción eréctil.

Los estudios demuestran que la probabilidad de que se produzca algún grado de disfunción eréctil en el hombre deprimido, oscila entre el 60% y el 90%, dependiendo de la gravedad de la depresión. Aunque superar la depresión puede ser una tarea lenta y difícil, la recuperación no tiene por qué verse complicada por los problemas de erección.

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Por este motivo, es fundamental que ambos componentes de la pareja estén bien informados sobre la disfunción eréctil, de forma que puedan tratarla si llega a producirse.

Por fortuna, la mayoría de los pacientes con depresión que padecen disfunción eréctil, encuentra un tratamiento efectivo, independientemente de que el origen de esta disfunción sea su patología o la medicación prescrita.

Tabaco y alcohol

El tabaco y el consumo excesivo de alcohol son dos hábitos nocivos que tienen efectos negativos sobre numerosos tejidos y funciones del organismo, entre los que se encuentra la respuesta sexual y más concretamente, la función eréctil.

Se ha observado un aumento en el número de casos de disfunción eréctil entre la población fumadora. El tabaco es un factor de riesgo cardiovascular y puede alterar también los niveles hormonales normales. Por su acción directa sobre los vasos sanguíneos y por facilitar el desarrollo de aterosclerosis, reduce el flujo sanguíneo en el pene, dificultando así el proceso de la erección.

La ingesta abusiva de bebidas alcohólicas provoca cambios en la respuesta sexual. Tanto el consumo crónico, como la ingesta aguda ocasional de alcohol, pueden producir trastornos en los mecanismos de la erección. El consumo crónico tiene efectos nocivos sobre el hígado, los testículos y la transmisión del impulso nervioso, por lo que es un factor de riesgo que se asocia en muchas ocasiones a la disfunción eréctil.

Trastornos emocionales

La ansiedad, el estrés, el exceso de trabajo o preocupaciones, son causas frecuentes de disfunción eréctil. Las situaciones de alerta o estrés hacen que los niveles de ciertas sustancias químicas como la adrenalina, no sean los adecuados para que suceda la vasodilatación de las arterias que irrigan el pene. De este modo, la afluencia de sangre se ve dificultada y se ve impedida la erección.

Con frecuencia, suele haber problemas emocionales que pueden afectar tanto a la autoestima como a las relaciones del individuo y pueden perpetuar la disfunción eréctil.

Miedo de actuación y actitud del espectador, sea la causa de la disfunción eréctil orgánica o psicógena, siempre se establece lo que se denomina ansiedad de rendimiento y anticipación al fracaso. El hombre permanece demasiado atento a la respuesta eréctil, se auto observa, no centrándose en las sensaciones eróticas agradables que influyen positivamente en la consecución de la erección.

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Esta situación, contrariamente a lo esperado, conduce a sucesivos fracasos erectivos. De esta forma se entra en una espiral fallo-miedo-fallo que suele ser difícil de superar por uno mismo. En estos casos, la ayuda temprana de un profesional puede ser determinante.

Hay una causa común en nuestra sociedad actual que es la “inactividad sexual”. Sin que exista ningún trastorno orgánico ni psicógeno, el individuo, por razones diversas, va distanciando progresivamente su actividad sexual, lo que va a afectar de diversas formas la respuesta sexual: excitación, orgasmo, satisfacción, entre otras, causando frecuentemente anorgasmia femenina o impotencia masculina.

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